Este es el primero de una serie de seminarios sobre la libertad de expresión durante el período de los Reinos Combatientes. Javier Caramés Sánchez defenderá que en este período hubo tres características que facilitaron la libertad de expresión: en primer lugar, la política estaba abierta al talento. En segundo lugar, el alto grado de descentralización política de aquel entonces permitía cambiar de un reino o estado feudal a otro. Si una persona no lograba obtener un cargo en un reino, podía irse a otro. En tercer lugar, no había ninguna institución encargada de controlar el conocimiento ni tampoco instituciones ideológicas con capacidad para llevar persecuciones.